Itinerario largo y variado por una zona solitaria pero
de una belleza sobrecogedora, por la umbría de la sierra de Aubenç,
el Pla de Tolustre y el cañón de Valldarques.
El
itinerario propuesto es largo y difícil. Se puede hacer con una
buena preparación física, y permite atravesar una serie
de parajes de un gran interés cultural y paisajístico,
lugares generalmente solitarios pero bellísimos, en buena parte
por la umbría de la sierra de Aubenç. Empezamos en Nargó,
para tomar la carretera que va en dirección a Andorra. Encontramos
a la izquierda la iglesia antigua de Sant Climent, uno de los monumentos
más impresionantes de la comarca.
A la altura de les Masies nos desviaremos para tomar la pista que
nos lleva a la casa de l'Oliva y al despoblado de Aubàs. Debajo
de la Torre del Duc, la gran roca que preside todo el cañón
de Valldarques, la pista continua por su umbría. Pasamos bajo
las ruinas de Santa María de Remolins y cerca de diversos ejemplos
de la muy personal arquitectura de la zona.
Después
de la subida salimos a la carretera asfaltada que, en dirección
sur, nos lleva hacia Gavarra. Vale la pena detenerse un rato: las casas
con pesadas cubiertas de piedra, el castillo, la vista sobre los llanos
de la Noguera y el Urgell.
Desde
Gavarra bajamos a la Font d'Isot, donde antaño hubo una encomienda
de la orden del Hospital. Allí empieza el ascenso al Pla de Tolustre,
una gran extensión plana, rodeada de montañas, con casas
imponentes hoy abandonadas. Nos recibirán las ruinas de l'Església
Rònega. Atravesaremos el Pla en dirección norte, para
volver a bajar a la umbría de Valldarques. Desde allí
retomaremos la pista que nos llevará a Aubàs.
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