Recorrido fácil, con algunas subidas en su tramo
final, que discurre por las dos orillas del Segre y permite contemplar
el espinazo de colinas en el corazón del Urgellet.
El
primer tramo de la ruta, hasta llegar a Alàs, sigue el itinerario
13. En Arfa, en vez de continuar en dirección al Pla, atravesaremos
el Segre por un puente de origen medieval, uno de los pocos supervivientes
de las inundaciones del 1982. A partir de este punto empieza el trayecto
de vuelta. Dejamos a la izquierda la colina sobre la cual hay el pueblo
de Montferrer, una antigua posesión del obispo de Urgell, donde
mandó construir un castillo para vigilar las idas y venidas de
los vizcondes de Castellbò.
Dejaremos la orilla para ascender por las calles de una urbanización.
Ganamos vista sobre las montañas de Nabiners y la Coma, y también
sobre el Mesclant de les Aigües, el lugar donde confluyen el Segre
y el Valira. Continuamos subiendo hasta llegar a la cresta. Una bajada
muy pronunciada nos llevará al Coll de Ciutat, o la Llengua de
Serp, como también se le conoce. Pasamos al lado de unas antiguas
instalaciones militares -la Ciutadella- que se construyeron hacia la
fin del siglo XVII para proteger el castillo de Ciutat. Hoy alberga
una escuela de turismo.
Llegamos a Castellciutat, dominado por el castillo, que fue la antigua
residencia de los condes de Urgel y, más tarde, la fortificación
más importante del vizcondado de Castellbò, que fue transformada
en una fortaleza moderna por el ingeniero italiano Ambrosio Borsano,
el 1692. Por la palanca de Ciutat llegaremos al sector más occidental
del ensanche de la Seu, para volver al punto de partida.
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